Descripcion
El Ferrari 125 S es un modelo icónico que marca un hito en la historia de la marca italiana, siendo el primer automóvil en llevar el nombre Ferrari. Lanzado en 1947, el 125 S fue un proyecto personal de Enzo Ferrari, desarrollado para establecer a su empresa como un competidor serio en el mundo del automovilismo. Solo se produjeron dos unidades de este modelo durante su breve tiempo en el mercado, lo que lo convierte en una pieza de colección extremadamente valiosa y buscada.
El diseño del Ferrari 125 S fue revolucionario para su tiempo, presentando un motor V12 de 1.5 litros diseñado por Gioachino Colombo, capaz de producir aproximadamente 118 caballos de fuerza. Este motor, combinado con una carrocería ligera y un chasis tubular, permitió al 125 S alcanzar una velocidad máxima de alrededor de 210 km/h, un logro impresionante para la época. La transmisión manual de cinco velocidades y la suspensión independiente contribuyeron a la maniobrabilidad y el rendimiento del coche en circuitos de carreras.
A pesar de su corta vida, el Ferrari 125 S dejó una marca indeleble en el mundo del automovilismo al ganar seis de las 14 carreras en las que participó en 1947, incluyendo su debut en el Circuito de Piacenza. Este éxito cimentó la reputación de Ferrari como fabricante de coches de alto rendimiento y estableció las bases para futuros desarrollos en ingeniería automotriz.
El Ferrari 125 S no solo es significativo por ser el primer coche de la marca, sino también por establecer un estándar de excelencia que Ferrari ha mantenido durante décadas. Aunque no recibió premios formales, su legado perdura como un testimonio del ingenio y la pasión de Enzo Ferrari por la innovación en la competición automovilística.
El diseño del Ferrari 125 S fue revolucionario para su tiempo, presentando un motor V12 de 1.5 litros diseñado por Gioachino Colombo, capaz de producir aproximadamente 118 caballos de fuerza. Este motor, combinado con una carrocería ligera y un chasis tubular, permitió al 125 S alcanzar una velocidad máxima de alrededor de 210 km/h, un logro impresionante para la época. La transmisión manual de cinco velocidades y la suspensión independiente contribuyeron a la maniobrabilidad y el rendimiento del coche en circuitos de carreras.
A pesar de su corta vida, el Ferrari 125 S dejó una marca indeleble en el mundo del automovilismo al ganar seis de las 14 carreras en las que participó en 1947, incluyendo su debut en el Circuito de Piacenza. Este éxito cimentó la reputación de Ferrari como fabricante de coches de alto rendimiento y estableció las bases para futuros desarrollos en ingeniería automotriz.
El Ferrari 125 S no solo es significativo por ser el primer coche de la marca, sino también por establecer un estándar de excelencia que Ferrari ha mantenido durante décadas. Aunque no recibió premios formales, su legado perdura como un testimonio del ingenio y la pasión de Enzo Ferrari por la innovación en la competición automovilística.